domingo, 26 de noviembre de 2017

DE FARO A FAROL (Vol. 2)

DÍA 2
CONCEIÇÂO-SAGRES

Segunda dia de ruta, toca dejar el hotel y desplazarse hasta la localidad de Sagres, donde haremos noche. El mapa de la ruta a seguir es el siguiente.
Desde la ventana de nuestra habitación vemos la moto, la cual tuvo que pasar la noche a la intemperie.
Ampliamos.
Revisamos la moto antes de partir, una última foto y continuamos...

...o dos.

Decimos adios a este peculiar hotel, el cual recomiendo, sin lugar a dudas, mas que nada por la hospitalidad del dueño.

Nos vamos ahora para Tavira. El día amenazo nublado y con ganas de llover, pero de momento ni una gota, vimos el tiempo antes de salir y solo eran un par de nubes.

Pasamos por la puerta de el Supermercado donde compramos la cena.

De camino a Sagres, tenemos pensado realizar varias paradas, visitaremos en primer lugar Tavira. Os iré comentando un pocos los lugares para no perderos mucho, ya que sacamos infinidad de fotos, jajajaja.

Ciudad e Tavira, sin bajarnos de la moto, recorremos sus calles.


Nos llama la atención que muchas de sus casas, sus fachadas lucen losas con infinidad de dibujos.


Lo peor los adoquines, me gustan, le dan un toque a la ciudad, pero para ir en moto no, es mas resbalan un montonazo, doy fe de ello, que casi me voy al suelo un par de veces, jajajaja.

Tienda oficial de la selección portuguesa de fútbol.

Seguimos dando vueltas por la ciudad. Os dejo un par de fotos, realizadas desde la moto.



Paramos ahora en su paseo marítimo por llamarlo de alguna manera, desde aquí divisamos una bonita estampa con todos los barcos atracados en la ria.




Pasamos por la puerta del Regimiento de Infantería Nº 1.


Desde Tavira, nos vamos ahora en busca de la costa, concretamente hasta la Praia do Barril, donde visitaremos su cementerio de anclas, pero antes tenemos que llegar.

Pasamos por Santa Luzia, como podeis ver es la capital do polvo, pero no seáis mal pensados, polvo en portugués significa pulpo. Solo tienes que pasar por sus calles y el olor a pulpo se te impregna en la ropa, no se, quizás se tiran cociendo pulpo las 24h.

Primer ancla que vemos, esto se anima.



Hacemos una parada en su pequeño puerto para hacer un par de fotos. Como podéis comprobar la marea esta baja.






La playa que buscamos esta pasado el pueblo, no muy lejos de aquí, en los arboles que se ven al fondo.

Aparcamos la moto nos vamos a pie. Como dato curioso, a parte de que la marea esta muy baja, decir, que se pueden observar miles de agujeros en el fango, donde asoman cangrejos con una enorme pinza de color blanquecina, una pasada la cantidad que puedes ver por la zona.

Para llegar a la playa, tenemos que cruzar este puente y una vez al otro lado tenemos dos opciones, llegar a la playa recorriendo un sendero, por el cual se tardan 15 o 20 minutos andando en llegar o bien coger un trenecillo que te lleva hasta la misma playa, son dos kilómetros de recorrido, así que el tiempo lo puse a ojo, jajajaja. Nosotros optamos por la segunda opción, os explicaré el porque en la siguiente foto.  

Pues bien, como podeis comprobar vamos cargados como mulas, así que no es cuestión de ir andando.

Estas son las vistas desde el otro lado del puente.
 
Esperando al tren nos echamos unas risas.
Esperando la llegada del tren.
Ya esta aquí, así que nos vamos para la playa.
El tren es una muy buena opción si no quieres andar y su precio no es nada caro, 1,30€ el viaje, así que por un total de 5,20€ nos damos un paseíllo en tren.
Estas son algunas de las fotos que sacamos del lugar. Se respira tranquilidad, el estar nublado ayuda, ya que de haber sol me imagino la playa infectada de gente. 
Tengo que decir y si no reviento, que la arena parece pan rayado, jajajaja.
Os dejo algunas tomas.



Tenia que poner algo, esta claro.
Justo al lado el cementerio de las anclas, ya veréis porque se le llama así.


Son unas cuantas la verdad, os contare algo de su historia, la cual pude sacar de internet y de uno de los folletos de la zona. 

La Praia do Barril, esta muy cerca de Tavira, como habéis podido comprobar, concretamente en el Parque Natural de Isla Formosa, y es testigo del pasado del Algarve, cuando los barcos atuneros portugueses salían de pesca durante largas jornadas e incluso días, surcando miles de kilómetros en busca del preciado atún. Este tipo de pesca ya quedo para el recuerdo, pues la actividad se abandonando con el paso del tiempo y con el, las anclas, las cuales iban siendo abandonadas en la playa. Esto llevo a los habitantes de la zona a colocarlas en este lugar, alineadas unas con otras, dando como resultado el cementerio de las anclas de la Praia do Barril, sin lugar a dudas un lugar donde perderse.



Seguimos andurreando por la zona, la cual no deja de gustarnos, si no todo lo contrario.





En el lugar existe también varios bares y puestecillos de souvenir.

Hora de irnos, ya que aun nos queda un buen trecho para llegar hasta nuestro destino y aun quedaban cosas por visitar. Nos despedimos de este encantador lugar con un par de fotos mas, mientras que hacemos tiempo para coger el tren.


Ahora si, ya estamos en el tren, el cual nos conduciría hasta el punto de partida.

Ampliamos.
Volvemos a cruzar el puente.


La moto nos aguarda, así que nos vamos de ruta.

Antes de continuar os dejo algunas de las fotos que pudimos sacar de este encantador lugar, con la GoPro.








Algo que nos llamo la atención y que me parece muy buena idea, es el tema de las antenas de telefonía móvil, no se si apreciáis bien la foto o no, pero os explico un poco. Este árbol que veis a continuación es una antena de telefonía móvil, la cual esta adornada como si de un pino se tratara, para no romper la estética del paisaje, la verdad es que tienes que fijarte muy bien para darte cuenta de ello. A mi parece una muy buena idea que se vean así, y no tan aparatosas como son algunas. Si buscas por internet podéis encontrar diversos modelos.

Cogemos ahora un desvio que nos llevara hasta la siguiente parada. Atravesamos un par de pueblos en los cuales no nos detenemos, sacamos algunas fotos por el camino.






El asfalto por aqui es malísimo, muy bacheado y con numerosa gravilla, incluso encontramos varios tramos en obras.


Llegamos a Olhâo, donde circulamos por sus calles estrechas repletas de casas con fachadas de losa, hasta el centro de la ciudad, donde hacemos un alto en el camino para estirar un poco las piernas.

Esta ciudad y la anteriormente visitada, nada tiene que ver, ya que Conceiçâo esta mas enfocada a un tipo de turismo determinado.


Los flamencos aqui visten con otro plumaje, jajajajaja.

Continuamos por sus estrechas calles.


De Olhâo pasamos a Faro, capital de la region del Algarve, no menos turística que las anteriores. 


Nos vamos directamente a su casco antiguo.


Para nuestra sorpresa os dire, que esta es la única Kawasaki GTR1400 que nos encontramos en todo el viaje.

Paramos cerca de aquí, ya que el casco histórico esta dentro de esta zona, cruzando esa puerta por la cual no se puede circular, pero tranquilos buscamos la forma de pasar para dentro. Antes visitamos una oficina de turismo para rapiñar algo, aunque os recuerdo que los mapas se tienen que pagar.



Bordeamos el lugar, hasta encontrar otra entrada.


Este es el parque de bomberos de Faro, el cual se encuentra al torcer la esquina de la foto anterior. Sinceramente me sorprendió eso de BOMEIROS VOLUNTARIOS, jajajaja, me dio por pensar que todos los bomberos trabajaban de forma voluntaria, pero no, tan solo es que se llaman así, jajajaja.

Otra toma mas de la entrada, hasta que dimos con la que si se podía entrar.

Rodeamos las murallas y.......



......encontrada la puerta de libre acceso, por la cual entramos y automáticamente nos dirige fuera de nuevo, jajajajajaja.


Estatua a D. Alfonso III, Rey de Portugal, del cual podéis buscar mas información pinchando en el siguiente enlace, por si os interesa saber mas. Rey Alfonso III de Portugal.

Seguimos en la carretera.


Decimos adios a Faro.

Pasamos por un par de pueblos sin detenernos.

Hasta coger la salida que nos conducirá hasta nuestra siguiente parada, Quarteira.

Me encanta circular por carreteras llenas de arboles, lo único malo es que a veces las raíces de los mismos levantan un poco el asfalto.

Entramos en la ciudad y directos sin parar hasta su paseo marítimo. 



Pasamos justo al ladeo del puerto pesquero, la cantidad de gaviotas en la zona da hasta miedo, ya que hacia alguna vez que otra, vuelos muy bajos.


Nos paramos al lado de esta barca, donde tomamos un par de fotos y miramos el mapa, ya que se estaba haciendo la hora de comer y aun teníamos que comprar la comida.



A la salida de Cuarteira nos topamos con un supermercado, así que entramos un segundo para comprar víveres. Me sorprendió bastante ese pescado negro brillante, la verdad es que tiene una forma abismal. Aquí compramos unos cuantos cacetinhos (bollos pequeños) y unas hamburguesas de porco (puerco-cerdo), de pollo era raro que no hubiese, pero bueno.

Volvemos a la moto, en busca de algún merendero a pie de carretera, no queremos perder mucho tiempo, ya que aun queda mucho que ver por la zona. Pasamos por varios pueblos sin detenernos, pueblos pequeños a pie de carretera, en los cuales no vimos ni un triste banco con sombra donde sentarnos para comer.


Algo perdidos por la zona.

Al final, a la salida de este pueblo......

......encontramos un merendero a pie de carretera, así que sin pensarlo ni un segundo, entramos. Montamos el campingaz y empezamos a cocinar, un poco de aceite que ya trajimos de casa, mayonesa, ketchup, platos, cubiertos, servilletas, etc, preparados si que venimos (todo ello lo portamos en el topcase, baúl trasero o maleta trasera, como queráis llamarlo), se nota que viajamos con el modo rata en on, jajajajaja.



La moto sera aparcada justo al lado, controlada al máximo.

En todos los viajes siempre vemos a alguien haciendo la pirula, en este caso este camión, dando marcha atrás en mitad de una rotonda.

Cruzamos el río Arade, por un puente en obras. Al cazarlo vemos como la marea sigue aun baja.



A Portimao que vamos ahora. Para que os hagais una idea, esta ciudad es el Benidorm del Algarve mas o menos.

Una vez en llegado a Portimao, nos dirigimos a la Praia da Rocha, la cual vimos por internet que estaba muy guapa, aunque eso de que fuese la Benidorm de la zona no nos llamaba mucho, la verdad. Os dejamos un par de fotos y juzgais vosotros mismos. Son dos playas.

Las fotos están realizadas desde el mirador de Três Castelos.



En la zona existe un paseo marítimo, que va por encima de los acantilados y otro por abajo, el cual comunica todos los chiringuitos y discotecas de la zona, así que decidimos bajar y dar una vuelta por la playa, ya que vimos en uno de los paneles de la playa, que existía un túnel natural que comunicaba las dos playas.

Este es uno de los paneles que pudimos ver, que te advierte de posibles desprendimientos de roca.

Una vez abajo, nos dijimos a la zona de los túneles. La arena de la playa, vuelve a ser de pan rayado, jajajajaja.

Este es uno de los túneles que comunica las dos playas, realizado por la mano del hombre, pero sabemos de la existencia de uno natural, así que elegimos la segunda opción.

Este es el túnel natural, como podréis ver en las siguientes fotos, el mismo es demasiado bajo, por lo que hace que tengas que agacharte y andar con cuidado. Para colmo al ir con la chaqueta de la moto, la bolsa de sobredeposito que llevo a la espalda etc, hicieron que rozase en mas de una ocasión. 

Nos disponemos a cruzar el túnel, nos vemos al otro lado.






Tengo que decir, que ya se me olvidaba, que si se quiere pasar a la otra orilla de la playa por primera linea de mar, tienes que si o si entrar en el agua.

Toca ahora subir, así que nada, mi cara lo dice todo, un calor asfixiante y cargado, lástima que no siguiese nublado como esa misma mañana.

Un par de fotos mas realizados con la GoPro.









Volvemos a la moto, pero no por mucho tiempo ya que ahora pararemos en otra playa y andaremos un poco mas para ver unos acantilados espectaculares.

Pasamos por Odiáxere donde cogemos un desvío que nos lleva a la ciudad de Lagos.

Esto es lo que vemos sin bajarnos de la moto.







Pasamos por la puerta de el Forte da Ponta Bandeira.

Tras un buen rato buscando tanto en carteles como en uno de los mapas que portamos en la moto, damos con una de las playas que queríamos visitar, la Praia Dona Ana, toda una maravilla la verdad. Para llegar a ella se accede bajando unas escaleras de madera ancladas en la roca del acantilado.


Nos hacemos un par de fotos y continuamos la visita por la costa.


Turno ahora de visitar Ponta da Piedade, pero para verlo mejor bajamos hasta abajo, donde sacamos un par de fotos. Abajo existe la posibilidad de coger una barca y dar una vuelta por la zona, para tener otra perspectiva, todo ello previo pago, aunque la verdad es que el precio lo desconozco, ya que teníamos el tiempo justo y queríamos llegar a Sagres antes de que oscureciese.

Os muestro a continuación varias de las fotos que sacamos del lugar, al cual no me importaría volver con algo mas de tiempo y el bolsillo lleno de billetes, jajajaja.







Fotos realizadas con la GoPro.





Para terminar la visita, os dejo con un impresionante vídeo grabado con un drone en 4K, donde podéis ver el lugar con detenimiento. El vídeo no es mío, pero me gustaría. 

Tras una larga jornada de moto, llegamos a Sagres, buscamos el hotel donde nos hospedaríamos, que para sorpresa nuestra, la entrada principal la tiene cortada, por lo que nos vemos obligados a dar la vuelta y buscar otro acceso. Al llegar al hotel, aparcamos la moto en la misma puerta, eso si, con consentimiento del dueño del hotel, el cual muy amable, nos dijo que la moto la pusiésemos en la misma puerta, ya que el hotel estaba abierto las 24h y así estaría mas controlada, todo un detalle por su parte la verdad.

Nos registramos en el hotel, la habitación 206 es la nuestra, así que cargados con el equipaje y el topcase, cogemos el ascensor y nos vamos a la habitación, en la cual como de costumbre ya, dejamos las cosas, inspeccionamos un poco la habitación y nos damos una ducha. Una vez aseados, cambiados y listos, nos vamos a dar una vuelta, ya que siempre es bueno después de una larga jornada de moto, andar un poco para estirar las piernas.

La verdad es que se nos hizo tarde, al salir del hotel ya es casi de noche, llegamos a eso de las 18:30-19:00h, y entre unas cosas y otras, salimos del hotel a eso de las 20:00h, así que lo primero que hacemos es buscar un supermercado para comprar la cena y ya si eso damos una vuelta después. Justo al lado de el hotel había un Supermarche, una cadena de supermercados, pero para llegar hasta a el, tenemos que dar toda la vuelta a la urbanización. Una vez en el supermercado, compramos la cena, un par de ensaladas, un par de cervezas, agua, unas patatillas fritas y poco mas. Al final a lo tonto el supermercado cerraba y tenemos que salir por patas, pagamos la compra y salimos.
Pensamos en bajar a la zona de la playa, pero quedaba algo retirada, y ponerte a buscarla esas horas, sin luz apenas, ya no solo por el sol, si no que a parte, las farolas estaban muy alejadas unas de otras, por lo que apenas se veía, me imagino que será por el tema de ahorrar o a saber, el caso es que al final decidimos volver al hotel, cenar, planear la ruta del día siguiente y descansar un poco.

Al llegar a la habitación, no sabemos por que, pero hacía un frío increíble, antes de salir enchufamos el frigorífico, pero no creo que sea por eso, jajajaja. Lo que si es verdad, es que es el único hotel en el que hemos estado por estos lares, que tenia una manta puesta en la cama y otras dos en el armario, teniendo que tirar de ellas, ya que casi morimos congelados, jajajajajaja.

Fin de la segunda parte del viaje, hasta aquí podemos contar, si quieres ver la tercera entrega, tan solo tienes que pinchar sobre el siguiente enlace, así que no te lo pierdas, pincha ya.


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